El doctor Paul Weston pasaba consulta en la HBO. Cada episodio proponía una danza emocional tan intensa como minimalista: dos personajes, intercambio de miradas y una paulatina excavación del yo. Dialogar sin prisas hasta encontrar la herida para, así, poder sanarla. Sin poder olvidar jamás, como escribió Paul Auster- aquí puedes leer su semblanza-, que las cicatrices constituyen amuletos contra el olvido. Aquel In Treatment que cautivó a la crítica entre 2008 y 2010 regresa ahora con una nueva protagonista: la doctora Brooke Taylor. La mirada levemente atormentada del actor Gabriel Byrne deja paso a los ojos expansivos de Uzo Aduba. La nueva consulta destaca por sus amplios ventanales. Los tiempos han cambiado y hoy entran en la psicoterapia de los personajes asuntos como los efectos de la pandemia o las políticas identitarias. A la espera de comprobar si este In Treatment relanzado alcanza el mismo éxito que hace una década, la reconstrucción del alma herida en pantalla nos permite trazar un puente con el diván literario. Porque hay novelas y, sobre todo, ensayos que buscan explicar cómo sobrevivir a esto que llamamos vida… desde la perspectiva del médico.

Las variaciones en torno a la psiquiatría en la literatura son múltiples: están los zumbados que han cruzado la línea macabra, como en el universo Lecter del Hannibal de Thomas Harris, los dramas potentes en los que el amor se entrecruza con la terapia, como en El Príncipe de las mareas, o esos en los que el psiquiatra se erige en el detective de un thriller, como en La paciente silenciosaaquí puedes leer la reseña completa. Sin embargo, el espejo más cercano a In Treatment puede que lo ofrezca Deberías hablar con alguien. Una psicóloga, su terapeuta y un viaje revelador por el alma humana. En él, Lori Gottlieb rememora no solo los casos de diversos pacientes, sino cómo ella misma ha de acudir a un viejo terapeuta para que le ayude a superar una crisis que ha hecho que su mundo se derrumbe. El inicio de Deberías hablar con alguien no tiene doblez: «Este libro plantea una pregunta: ‘¿cómo se produce el cambio?’, y responde diciendo: «a través de la relación con los demás’. La relación de la que hablo en estas páginas, entre terapeutas y pacientes, requiere de una confianza sagrada para que el cambio sea efectivo».

 

 

Ese cambio —mejor dicho: la esperanza de cambio— es la que planea desde el primer fotograma de cada personaje/paciente de In Treatment. Porque la serie no es solo un drama mayúsculo, sino también el reflejo de una profesión. Quien desee acercarse más a ella puede probar también con las memorias de Irvin D. Yalom, Profesor de Psiquiatría en Stanford y autor de novelas como El día que Nietzsche lloró, donde la historia, la filosofía y el psicoanálisis se daban la mano. En sus Memorias de un psiquiatra Yalom combina casos de pacientes con el relato de su propia vida. La etiqueta de «psicoterapia existencial» que él practicaba casi puede entenderse como una respuesta ante pasajes de su infancia tan agónicos como este: «Siempre que mi madre estaba angustiada, retrocedía hasta el pensamiento primitivo: si ocurría algo malo, alguien debía tener la culpa. Y ese alguien era yo. Esa noche, más de una vez, mientras mi padre se retorcía de dolor, ella me gritó: ‘¡Tú… tú lo has matado!’. Me dejaba saber que mi rebeldía, mi falta de respeto, mi perturbación del orden familiar —todo eso— lo había desgastado completamente».

 

Si los recuerdos de Yalom suponen una suerte de auto-terapia, los lectores más preocupados por entender el dolor, la culpa y la forma en que las personas lidian con toda esa pesada mochila encontrarán respuestas en un clásico: El hombre en busca de sentido. El libro fue escrito por Viktor E. Frankl, un médico austriaco que sufrió los horrores de los campos de concentración. Frankl estuvo preso durante tres años en Auschwitz y otras sucursales nazis del infierno. Murieron sus padres, su esposa y un hermano. El hombre en busca de sentido es la sobrecogedora crónica de cómo pudo vencer al horror. Allí se agarró a la esperanza y la trascendencia como forma de sobrevivir: “No hay nada en el mundo que capacite tanto a una persona para sobreponerse a las dificultades externas y a las limitaciones internas, como la consciencia de tener una tarea en la vida”.

 

 

Autores citados

Lori Gottlieb es escritora, periodista y psicoterapeuta. Mantiene una famosa columna en la revista The Atlantic («Dear Therapist»), que también cuenta con una versión en podcast. El éxito de Deberías hablar con alguien, publicado en 2019, ha hecho que la cadena ABC esté preparando una adaptación televisiva.

Irvin D. Yalom proviene de una familia de judíos ruso-polacos que tuvieron que emigrar a Estados Unidos huyendo de los progromos. Ha escrito nueve obras de ficción, algunas muy experimentales, y siete de no-ficción.

Viktor E. Frankl nació en Viena en 1905, ciudad donde murió 92 años después. Frankl es el fundador de la logoterapia, que propone un acercamiento humanista que superara las limitaciones del psicoanálisis de Freud y la psicología individual de Alfred Adler. Su obra más conocida, El hombre en busca de sentido, ha vendido más de 16 millones de copias en todo el mundo.