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Reseñas
literarias
Iñaki Domínguez

Homo relativus

por:
Esperanza Ruiz
Editorial
Akal
Año de Publicación
2021
Categorías
Sinopsis
El relativismo es indispensable para entender la realidad en la que vivimos. Sirve, digamos, de eje fundamental a la cosmovisión dominante del mundo occidental. Tanto en redes sociales como en conversaciones privadas entre amigos, pasando por medios de comunicación mayoritarios, el relativismo se ha convertido en una herramienta conceptual de obligado uso. Del Quijote al concepto de ideología presente en el cine de ciencia ficción, pasando por el arte abstracto, la filosofía de la ciencia, la autoayuda, los estudios de género, la filosofía postmoderna, el lenguaje inclusivo, la financiarización de la economía o el desarrollo de la nueva realidad virtual, esta obra muestra cómo la realidad material va quedando poco a poco desacreditada en favor del GPS, del mapa, de la representación mental. Contemplamos, desde una perspectiva histórica, el proceso a través del cual transferimos los contenidos primordiales de nuestra vida del ámbito material al representacional; un proceso íntimamente vinculado al desarrollo del capitalismo, en el cual la precarización creciente de la sociedad es compensada por una narcotiza
Iñaki Domínguez

Homo relativus

Iñaki Domínguez (Madrid, 1981) puso la directa en 2017 con Sociología del moderneo y desde entonces no ha parado. Al año siguiente, en 2018, publicó Cómo ser feliz a martillazos: Un manual de antiautoayuda y el año pasado el exitoso Macarras interseculares. Una historia de Madrid a través de sus mitos callejeros. 

Para que no nos durmamos en los laureles en 2021 viene con una nueva obra: Homo relativus. Del Iluminismo a Matrix. 

Detengámonos en Macarras interseculares un rato. Porque todavía colea y porque lo he regalado mucho. Iñaki tiene un espacio semanal en Subterfuge Radio llamado “Código macarra” en el que ha dedicado sesiones a Dum Dum Pacheco, el ex boxeador que protagoniza la portada del libro, Alfonso J. Ussía hablando sobre los poblados de la droga, amén de rockers, pioneros de la Movida o pandilleros afro de Fuenlabrada en los 90.

Para quien no lo sepa a estas alturas, Domínguez hace en esta obra un repaso del macarrismo madrileño. Desde el inicio de los pubs en la zona antiguamente conocida como Costa Fleming, cuyo desarrollo ocurrió entre los años 50 y 70 de la España de Franco (no tiene pérdida, la reconocerán porque cambian los nombres de Generales de sus calles constantemente) hasta la época del bakalao y más allá. A través de entrevistas, el autor recoge las opiniones de dueños de pubs, yonkis, rockers y todo aquél que formara parte de una tribu urbana desde los 60, cuando el fenómeno West Side Story le dio rollo al gregarismo callejero. Iñaki Domínguez es antropólogo y eso repercute en que Macarras interseculares no quede en un mero trabajo de documentación e investigación. Explica, por ejemplo el fenómeno por el cual macarras de bandas rivales se acaban haciendo amigos o disecciona los orígenes y motivaciones de cada tribu y sus escisiones.

Los macarras a día de hoy están en el otro lado, en el de las instituciones. Domínguez propone “una síntesis hegeliana: ni estar todo el día pegándonos ni ofendernos por cualquier gilipollez”.

Homo relativus  (Akal, 2021) es una obra impresionante, titánica, densa (sin connotación peyorativa). No tengo muy clara la diferencia entre géneros literarios pero sospecho que aquí se entremezclan o se reinterpreta el ensayo tradicional. Se puede usar como un manual, un libro de cabecera al que acudir en una refriega tuitera (no les recomiendo entrar en ellas, pero por si acaso, en Homo relativus encontraran argumentos frente a la barbarie, también conocida como posmodernidad). Sin embargo, el estilo que emplea no es puramente académico, dotando a la lectura de fluidez y amarrando al lector con ejemplos accesibles, por cotidianos, y contribuyendo a restar aridez -para los profanos- a la explicación filosófica.

Cuando ustedes se enfrentan a titulares o declaraciones de políticos, influencers o miembros del “mundo de la cultura” a los que no dan crédito, probablemente se pregunten, estupefactos, si han enloquecido. Ojalá. La realidad es que se ha recorrido un largo camino hasta llegar al relativismo aberrante y distópico. Matrix no se construyó en un día. Iñaki Domínguez aborda el sinuoso sendero por el que la realidad material ha sido sustituida por miríadas de simbologías y sensibilidades, con mención de honor a la cooperación necesaria del desarrollo capitalista.

Merece la pena echar un vistazo al índice: Relativismo en las artes, la literatura y el cine, Años sesenta del siglo XX, retrato de una revolución simbólica, Relativismo en el pensamiento, Relativismo y políticas de la identidad y Relativismo en el mundo actual. La fotografía del panorama es exhaustiva, la documentación ingente y el análisis impecable. La sombra del relativismo es alargada y no sólo toca a disciplinas relacionadas con las humanidades, también se atreve con las empíricas. Por si fuera poco, en el apartado de conclusiones, el autor no deja al lector huérfano de esperanza y propone soluciones para que el relativismo no le coma la tostada a la realidad. 

Desde el análisis de la obra de Philip K. Dick, pasando por el Quijote, la Ilustración, volviendo una y otra vez a la Grecia y Roma clásica, Hegel, Kant y hasta C. Tangana, las redes sociales o el “salario emocional”, el análisis de Domínguez excede con mucho a aquél que se limita a los culpables oficiales (aunque no por ello menos culpables). A saber: Marx y las revoluciones americana y francesa. 

El arte abstracto y figurativo dejan de lado, de manera aparentemente inocua, la realidad tangible; la economía financiera es especulativa; la ideología queer o la autoayuda se evaden de la realidad fomentando las ensoñaciones. De forma insidiosa y casi imperceptible un mundo virtual y alejado de la verdad es creado como forma de control por el poder. ¿Coadyuvantes? Hay miles, pero a destacar el papel de la corrección política y las universidades americanas.

El filósofo y profesor de la Universidad de Portland Peter Boghossian, que conoce bien el ámbito universitario, habla en el mismo sentido que Domínguez: las ideas desquiciadas de, por ejemplo, Foucault llegaron a las universidades y fueron interiorizadas por todas ellas. De ahí afectaron a nuestra cultura y a nuestras vulnerables (sic.) instituciones.

Lo que ocurre es que a la gente que entra en la universidad, se le adoctrina. Y luego sale ahí fuera. Esto produce problemas después, porque la gente que sale de las universidades acaba sentándose en jurados populares, trabaja en empresas y, como con una titulación universitaria puedes acabar siendo gestor, en la administración o en el sector privado. O sea, que la gente que está siendo adoctrinada por mis colegas en la PSU, operan en la sociedad, ocupan puestos de responsabilidad y llevan con ellos lo que han aprendido en la universidad. Esto es extremadamente importante, porque, como consecuencia, esta gente cambia la dirección de la organización social”.

En definitiva, Iñaki Domínguez presenta en Homo relativus un exhaustivo análisis filosófico, antropológico e histórico del relativismo moderno. La cantidad de referencias que maneja el autor dotan de lucidez a la síntesis y su particular forma de redacción, junto con los ejemplos que ilustran las tesis, rematan la ardua tarea de hacer accesible al lector diletante un texto de gran altura académica.

Además de en el programa de Subterfuge Radio, antes mencionado, pueden seguir al escritor en su sección “Palabra de modernólogo” en Hoy empieza todo (Radio 3).

 

Temática:
Ensayo sobre la posmodernidad
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