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Qué hermoso libro Los espinos (2022) recogido en En alguna otra vida, la Poesía reunida de David J. Calzado (Sevilla, 1979). Su mirada al pasado me ha recordado mucho a la de mi amigo Ángel Mendoza, también por el oído infalible para la música del verso y por el don de la emoción.
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Como por suerte esto no es una reseña, sino un aplauso, recojo el poema que más me ha gustado. Porque devuelve la voz a su madre y a las voces del mercado, de una manera tan vívida, que uno ve las escenas. Y hasta ahí, está todo genial, perfectamente construido. Pero en el último verso, zas, un zurriagazo de emoción, sencilla y complejísima. Todo el amor de una madre en una orden de cuatro palabras; y no es extraño que aparezca, porque las voces ya la habían convocado. Estaba ahí. Y porque ella había llegado, también su amor y su cuidado.
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A. E. Housman se dejaba de teorías y aplicaba a los poemas el test de la carne de gallina. Decía, con más guasa, «la navaja de la carne de gallina», porque se los recitaba mientras se afeitaba y, si se le ponían los pelos de punta, el poema era excelente.
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Con este no tengo que esperar al afeitado de mañana:
