–
«¿Y no vas a contar toda la verdad a tus seguidores, eh, ¡toda la verdad!?», se despedía anoche Carmencita al irse a dormir. Quiere que escriba mi artículo sobre mi habilidad fastidiando a mis hijos. Como saben que me preocupa de qué escribir cada noche, me ofrecía amablemente el tema. Como sabe que hay ideas muy buenas, pero que dan más para aforismo o para entrada de este diario que para columna, porque la columna exige un desarrollo, me decía: «Tienes mucho que escribir porque dominas una gran variedad de formas de fastidiar a tus hijos».
–
¿Qué había hecho? Decir: «Apaga la tele». Bueno, así: «A-pa-ga ya la tele». Nada más.
–
Lo más columnístico que tenía la cosa era el tono de Carmen. Puro Camba: «Ni completamente en serio, ni completamente en broma». Y yo ahora, como mi niña, aprendiendo de ella, medio en broma, medio en serio, no os miento, impagables seguidores, y dejo caer la verdad: fastidio a mis hijos a veces.
.