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Reseñas
literarias
Mariona Gúmpert

Infodemics, posverdad y la sociedad que viene

por:
Vidal Arranz
Editorial
Ciudadela
Año de Publicación
2022
Categorías
Sinopsis
El columnismo actual está dominando por dos vicios que parecen contrapuestos: el cinismo y el buenismo (...) Mariona Gúmpert está en la acera opuesta, aupada a hombros del liberalismo clásico, la doctrina social cristiana y el sentido común de quienes sienten alergia por este parque temático del consumismo, cada vez más insatisfactorio para todos. (Del Prólogo de Víctor Lenore). En Infodemics, posverdad y la sociedad que viene, Mariona Gúmpert, una de las columnistas más brillantes de la actualidad, combina perfectamente la solidez argumentativa con un estilo entretenido e ingenioso para presentarnos a través de estas páginas las contradicciones e incoherencias de nuestra cultura que han llevado al desgaste y decadencia del pensamiento posmoderno. Sus escritos, de gran rigor intelectual y fuerza expresiva, despiertan al lector de su letargo, haciéndole salir de sus inercias y replantearse la realidad, empujándole a revisar de un modo crítico los argumentos procedentes tanto de la derecha como de la izquierda.
Mariona Gúmpert

Infodemics, posverdad y la sociedad que viene

Infodemics, posverdad y la sociedad que viene recoge medio centenar de artículos que iluminan las contradicciones y miserias de nuestro presente.

No son habituales los libros que recopilan artículos periodísticos, salvo que se trate de escritos firmados por alguna figura estelar. Por mucha hondura y brillantez que puedan tener, existe la tentación de considerarlos materia caducada, un producto perecedero al que ya se le pasó la fecha. Por ello resulta especialmente relevante que Ciudadela se haya decidido a rescatar y publicar los de la filósofa Mariona Gúmpert, publicados en Vozpopuli, Disidentia y El Debate de Hoy durante los dos últimos años.

Por descontado, lo primero que hay que aclarar es que la decisión ha sido un acierto. En primer lugar, porque los artículos siguen tan vigentes hoy como el día que se publicaron, y se mantendrán frescos todavía durante mucho tiempo, tal es su capacidad para penetrar en las contradicciones y el espíritu de nuestro tiempo. Es más, vistos en conjunto, adquieren una nueva perspectiva y coherencia. Y lo que parecían reflexiones acertadas, pero más o menos aisladas, se muestran ahora como lo que realmente son: un conjunto de piezas que dibujan un retrato mayor y de más calado.

Como explica Víctor Lenore en el prólogo del libro, Gúmpert no cultiva la prensa sonajero, esa que presta más atención a la brillantez literaria, formal, retórica, que al contenido. Muy al contrario, los textos que se recogen en este libro se caracterizan por la valentía de sus propuestas —algunas tan a contracorriente como la crítica del aborto o de los desvaríos del feminismo dominante— y por la claridad en la exposición de ideas a menudo complejas, sin renunciar al manejo de conceptos filosóficos.

Pero no le haríamos justicia a nuestra autora si no fuéramos capaces de reconocer, además, un rasgo de excelencia que tiene que ver con el estilo y con la penetración de su mirada: Mariona Gúmpert encuentra en los argumentos y los ‘hechos’ más insospechados el disparadero para sus reflexiones. Y así, por ejemplo, la bronca de Jorge Javier Vázquez a Belén Esteban, y su rechazo a consentir en su programa nada que le pareciera ‘fascismo’ —entendido este término de esa forma tan extensa que se ha generalizado entre nosotros— le da pie a Mariona Gúmpert a hilar una reflexión sobre la intolerancia y la posmodernidad. Un texto en el que pasamos, casi sin despeinarnos, del histriónico Jorge Javier al sesudo Isaiah Berlin, para terminar en el controvertido Karl Popper, sin que el lector no iniciado en los avatares filosóficos pierda pie en el texto.

No es menos sorprendente el modo como construye una reflexión en torno a la necesidad y el valor de los lazos familiares a través de un comentario de la última versión de West side Story, de Steven Spielberg, o cómo reflexiona acerca del poder de los individuos, cuando son capaces de trabajar juntos, a partir de un comentario de la última película de la saga galáctica, El ascenso de Skywalker. Es especialmente estimulante su capacidad para dar la vuelta a las lecturas pesimistas de la realidad encontrando el requiebro por el que abrir paso al optimismo. Como en «Por qué Disney está haciendo un favor a España (sin pretenderlo)».

Con todo, mi artículo preferido es «Servidumbre humana», en el que una conversación cotidiana e íntima con un viajo amigo «muy sabio», y que padece Alzheimer, nos dice nuestra autora, le da pie a una sorprendente y muy profunda reflexión sobre la condición humana. «Mira, una gran mayoría de mujeres de mi edad no quieren ser madres», le cuenta en un improvisado desahogo. «Se está extendiendo la idea de que la maternidad es una esclavitud». Ante lo que el interpelado vuelve a ser por un instante el sabio que fue y le replica: «Pero vamos a ver, Mariona, ¡si todo es esclavitud!». E inspirada por esa idea, nuestra autora teje un artículo conmovedor en el que nos reencontramos con una gran verdad: que todo lo realmente valioso y que merece la pena implica renuncias y sacrificios, pero que va acompañado de grandes satisfacciones y pequeños milagros cotidianos a los que es imposible acceder de ningún otro modo.

Al libro de Gúmpert Infodemics, posverdad y la sociedad que viene, el único reproche que se le puede hacer tiene que ver justamente con su título, que puede despistar a potenciales lectores no iniciados, pues parece prometer ínfulas académicas y frialdad teórica, rasgos muy alejados del estilo riguroso pero, sobre todo, cercano y cálido, de nuestra autora.

En total son casi medio centenar de artículos organizados en siete capítulos temáticos que dan una idea de la amplitud de miradas que la selección abarca: «Libertad!», «Posmodernidad y cultura woke», «Feminismo y maternidad», «Hispanidad», «Escribir en pandemia», «Nuevos escenarios» y un capítulo final en el que bajo el imperioso título de «¡Vivamos!» se nos invita a agarrarnos a la vida desde sus visiones más hondas y verdaderas, aquellas que no ignoran que el sufrimiento es parte inherente de la condición humana y que apuestan por las lealtades y los lazos afectivos.

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