Hay tenistas que le cogen el tranquillo a esto de juego, match y partido en la pista y lo trasladan, sin problema, a su vida fuera de ella. A Roger Federer no sólo se le da bien ¡pero qué muy bien, 20 títulos de Grand Slam y 103 títulos ATP en su carrera lo atestiguan!, jugar al tenis. Desde esta semana, escribir es otra de sus habilidades y, a tenor del prólogo que se acaba de marcar para la colección de aventuras de Globi, por lo visto con muy buena maña. ¿Qué quién es Globi? Es uno de los personajes de cuentos infantiles más leídos en Suiza. Así lo explica Roger Federer: “Como muchas personas que crecieron en Suiza, tengo gratos recuerdos con los cómics de Globi. Sus aventuras se convirtieron en mis aventuras. Hoy, mientras miro mis antiguos libros de 1979 y principios de los ’80, me siento honrado y emocionado por unirme a Globi para compartir  nuestras historias juntos.  Espero que disfrutéis de estas aventuras tanto como nosotros escribiéndolas”. 

 

Es la 92ª edición de la serie Globi y se titula Globi y Roger. Se publica esta semana en francés, alemán e inglés. El icónico loro azul, que se puede describir mejor como el Mickey Mouse de Suiza, fue creado por Robert Lips en 1932 como una tira de dibujos animados que luego se convirtió en un libro de viñetas. Globi es uno de los personajes de cómic más popular de Suiza y Federer contaba en la presentación que conserva su propia colección desde pequeñito. Globi y Federer acuden a Wimbledon, juegan a tenis juntos y visitan una escuela en África. Si Globi es conocido por usar su boina y pantalones anchos a cuadros en sus muchas aventuras, los ilustradores se han mantenido fieles al estilo de Federer al dibujarlo con su ropa de tenis y su bandana característica. Los cuatro hijos de Federer y su esposa Mirka incluso hacen un cameo. Federer ha estado totalmente implicado en esta edición no sólo permitiendo el uso de su nombre e imagen, sino que ha ofrecido historias y anécdotas de su vida, además de escribir el prólogo. 

 

Poesía para los que leen prosa

El actor Ginés García Millán no ha parado, afortunadamente, de trabajar a pesar de esta terrible pandemia. Con dos de sus series recién estrenadas en Netflix y Movistar+, ¿Quién mató a Sara?, que se ha convertido en una de las series más vistas de Netflix, y Libertad, trabajando a las órdenes de Enrique Urbizu, así como varios proyectos por venir, el actor se siente afortunado y agradece al público la fantástica respuesta a su trabajo. Con una carrera estable en el mundo de la televisión y el cine, en sus casi tres décadas de carrera ha participado en muchas de las series más icónicas de la televisión española desde Periodistas, Isabel, Cuéntame cómo pasó y Adolfo Suárez. El Presidente, entre otras, y actualmente se adentra en el universo de las plataformas televisivas, que se enfrenta a importantes retos tras su expansión. Alguna vez me ha comentado que se considera, sobre todo, lector. Considera que es muy difícil escribir y transmitir con la palabra. Es un don. Y piensa la poesía como el arte total que le lleva a mundos maravillosos con la palabra.

 

Así, dedica a Miguel Munárriz, a propósito de Poesía para los que leen prosa, estas palabras: “Miguel Munárriz en su maravilloso libro Poesía para los que leen prosa nos invita a mirar la vida de una manera poética, a buscar la poesía en todo lo que nos rodea, buscar la verdadera poesía en la poesía y también en la prosa. La poesía para huir de la vulgaridad y del tedio. La poesía siempre está ahí, esperándonos… Gracias por enseñarnos a mirar”. 

 

Y apuntad esta otra recomendación: La mitad de la casa, de Menchu Gutiérrez. Estamos ante un libro de suspense psicológico. Un libro en forma de novela que comparte algo con la naturaleza del thriller y lleno de espíritu de poesía. La poesía, según la autora, hace que “un misterio pueda desvelarse sin perder su naturaleza de secreto”. Y prestando una extraordinaria atención al detalle, la palabra y el silencio. “Notarán que el tiempo a veces se queda suspendido en una casa cerrada, una casa detenida en una eterna estación de verano, es el tiempo que desobedece al reloj”. Desde un espejo, una agenda de teléfonos o un estanque todo es el puente que Menchu Gutiérrez utiliza para pasear un territorio lleno de fantasmas y ensoñaciones que entre sueños invoca la memoria.

 

 

Imparables contra la leucemia

Esther Arroyo, desde las redes sociales, no ha dudado ni un segundo a la hora de recomendar un libro a todos sus seguidores: El bebé forzudo, editado por la Fundación Josep Carreras y su cuenta de Instagram, Imparables contra la leucemia: “Os animo a comprar este cuento con un destino feliz, ayudar a los niños que sufren leucemia, cáncer en la sangre. Ayuda compartiendo, donando, comprando el cuento o simplemente informándote sobre esta enfermedad.
Esta enfermedad es considerada rara y no es rentable para la industria. Gracias a la Fundación Josep Carreras todos los beneficios obtenidos por la venta de este libro serán destinados a la investigación sobre la leucemia infantil”. El bebé forzudo es un cuento infantil, ilustrado por la vallisoletana Cinta Arribas, que narra las aventuras de un bebé, Gabriel, un niño de 1 año con leucemia. La enfermedad desde su propio punto de vista y desde el de su madre, Almira. 

 

Los autores de El bebé forzudo definieron, durante la presentación, el caso de Gabriel como “una odisea que empezó cuando no tocaba, pero que cambió la vida de este bebé forzudo y de sus papás. Ojalá contribuyamos a transmitir, aunque sólo sea en una milésima parte, la alegría, honestidad, fortaleza y valentía del bebé forzudo y de todos los pequeños imparables que están en nuestros hospitales”, contaban en la presentación los autores y divulgadores de esta generosa iniciativa.

 

Historias mínimas e íntimas, de ternura, de miedos…

Elena Sánchez es periodista de TVE especializada en cine. Presenta  Historia de nuestro cine, en La 2, pero no crean que piensa oxidarse, que diría Mariló Montero, hablando sólo de cine, sino que tan pronto pueda desea hacer entrevistas en profundidad, de esas en las que tienes a un personaje durante una hora para ti sola. Con un programa de viajes o de gastronomía también sueña ya que, asegura, estaría en su salsa. Mientras espera la oportunidad se dedica a otra de sus pasiones, la lectura: “Acabo de devorar La gente no existe, de Laura Ferrero. Me gusta ese regusto final que deja cada historia y esa sensación de querer que no se acaben… Muchos libros en uno. Gracias Isabel Coixet por el regalo y a Laura por el disfrute y la cariñosa dedicatoria”.

 No va muy desencaminada eligiendo este libro por su amor cinéfilo ya que Laura Ferrero, en 2020, fue librera de ficción en Nieva en Benidorm, de Isabel Coixet y está trabajando, actualmente, de guionista. Acaba de escribir una serie que se basa en su relato Sofía. Lo de ser actriz ya no lo ve tan claro. Confesaba hace poco que ella se considera “muy de segunda fila”, le gusta pasar desapercibida y ser actriz es todo lo contrario de eso. Con La gente no existe, Ferrero vuelve al género con el que debutó: relatos breves, historias mínimas e íntimas, de ternura, de miedos. La autora se pregunta “cuánto y cuándo, del tiempo que estamos aquí, estamos realmente vivos y qué es lo que nos hace o no estarlo”. A Laura le gusta pensar que sus relatos desprenden cierta confianza en la vida. Piensa, y ese es su leit motiv, que después de un final viene el inicio de otra cosa. Y ahí sí tiene cabida la esperanza.

 

 

Leer y disfrutar a lo Boris Izaguirre, ¡doblado de risa y felicidad!

Boris Izaguirre, entre bocados de Krissia, cuidados de belleza en Maribel Yébenes y grabaciones de Prodigios, nos recomienda sus dos últimas adquisiciones literarias y de paso celebra el Día del Libro: “¡Mis lecturas del Día del Libro y para celebrar Sant Jordi! La biografía de Bolívar de Marie Arana es apasionante!!! Y la nueva entrega del genial Eduardo Mendoza me tiene tan atrapado como doblado de risa y felicidad de leer algo tan bueno, magistral e incisivo!!”

 

 

Para empezar, Marie Arana no es historiadora profesional. La biografía de Bolívar refleja, por tanto, la falta de este oficio. Por otra parte, Arana utiliza reiteradamente fórmulas que dejan al aire la falta de cercanía con el protagonista que lleva entre manos. Es decir, mucha fórmula de distanciamiento “como dice un historiador”, con lo que el lector no logra identificar nada. Queda simplemente como una historia de buenos y malos que poco ayuda para profundizar en esa época “apasionante”, como dice Boris. Respecto al libro de Eduardo Mendoza, Transbordo en Moscú, es la tercera entrega de la serie de novelas del autor de Sin Noticias de Gurb protagonizada por el periodista Rufo Batalla. A pesar de que al principio Mendoza insistió mucho en que “no era una autobiografía” y sí un recorrido por sus “experiencias personales”, en esta tercera entrega hay un cambio: “Es bastante autobiográfico, ya que el personaje es muy parecido a mí en todos los aspectos aunque no coincidan las anécdotas vividas”. Y, añade que si el texto es más sombrío que los dos anteriores, quizá tenga que ver con que “la novela ha sido escrita en buena parte en la época del confinamiento, en la que hemos tenido menos contacto social”. Confesaba, también, que disfrutó mucho rememorando dos momentos extraordinarios de la historia española, la Expo de Sevilla y los Juegos Olímpicos de Barcelona, “como si se lo contara a los nietos”. Y, por cierto, para los fans, Mendoza deslizó durante la presentación un detalle, el homenaje a uno de sus géneros favoritos, la novela de espías, “soy un lector angustiado de literatura de espías, porque necesito más novelas de las que se publican”.