Afortunadamente, vamos retomando, poco a poco, la vida y los actos sociales. Los Reyes presiden, acompañados de la princesa Leonor y la infanta Sofía, la ceremonia de entrega de los Premios Fundación Princesa de Girona (FPdGi) 2020 y 2021, premios que tuvieron que cancelarse el año pasado por la pandemia. La ceremonia Aquí, el presente, celebrada en Caixa Fórum de Barcelona, subraya la importancia de los jóvenes para construir un mundo mejor y así lo  destacan en la gala con la trayectoria de los premiados. La cita reúne a los premiados de 2020 y de este 2021, en las categorías habituales: Artes y Letras, Investigación Científica, Internacional, Social y Empresa. Y todos ellos tienen algo en común: menores de 35 años y han conseguido la excelencia en su campo. El futuro está asegurado. La Princesa Leonor, a pesar del año en blanco que los premios han soportado a consecuencia del Covid, no se ha desvinculado durante este tiempo de la Fundación y, además de participar vía on line en la reunión con el patronato el pasado diciembre, también mantuvo un encuentro virtual con los premiados de 2020 hace ahora un año. Por fin, este jueves se han conocido y expresan sus deseos de seguir trabajando cada uno en su especialidad. Este premio es un magnífico aliento.

 

Si hablamos de juventud y excelencia no podemos obviar El XXXIII Premio Internacional de Poesía Loewe 2020 que ha galardonado a Mario Obrero con el Premio de Poesía Loewe a la Creación joven 2020 por Peachtree City. El ganador, nacido en Madrid en 2003, es el más joven en la historia del Premio, 17 años -16 cuando escribió el poemario-. El jurado del premio, presidido por Víctor García de la Concha, estaba compuesto por Gioconda Belli, Antonio Colinas, Aurora Egido, Margo Glantz, Juan Antonio González Iglesias, Carme Riera, Jaime Siles, Luis Antonio de Villena y Aurora Luque, ganadora de la anterior convocatoria. Belli aseguró sobre el joven Mario Obrero y su libro Peachtree City: “Un poeta jovencísimo se revela en un libro que con imágenes inusuales y un aliento poético que retrata la multiplicidad cultural de la globalización, consigue, con ironía y destreza, un poemario sorprendente”.

 

 

Mata Mua se queda

Estamos de enhorabuena. Al menos, en cuanto al tema Arte. El ministerio de Cultura y Deporte y Carmen Thyssen han acordado prorrogar por tercera vez la firma del contrato para que se quede en España la colección de la baronesa por un plazo de 15 años y con la inclusión del Mata Mua. En anteriores aplazamientos de la firma ambas partes ya matizaron que «no existía ningún problema» y atribuían estas ampliaciones y retrasos para la firma a «trámites burocráticos».  El ministro de Cultura y Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes, durante una visita oficial en Roma el pasado mes de mayo, ya aseguró que el asunto iba bien y el acuerdo estaba hecho. Además, avanzó que cuando estuviera listo el documento «desde el punto de vista jurídico» se firmaría en un acto en el que también estaría presente el hijo de la baronesa, Borja Thyssen, que es cotitular de parte de la colección. Atrás queda el lógico disgusto, por parte sobre todo de los amantes del museo y sus magníficas obras expuestas, cuando nos enteramos de que Mata Mua, de Paul Gauguin, salió del museo en junio del año pasado y que podría quedar fuera ad infinitum. “Hasta que hemos llegado a este acuerdo, las obras son de la baronesa y tenía derecho a sacarlas», apuntó Rodríguez Uribes. Todo solucionado, Mata Mua continúa con nosotros. Con este acuerdo, se pondría fin a nueve años de prórrogas del préstamo que la baronesa Thyssen-Bornemisza había acordado con el Estado en 2002 y que debían prorrogarse cada pocos meses. 

 

Qué mejor que releer para la ocasión La reina de las nieves, de Carmen Marín Gaite (Anagrama).  Una novela sobre la familia, la incomunicación, la soledad y la búsqueda de la propia identidad, temas siempre presentes en la obra de Gaite, como me contaba la autora María Belén Sánchez. En ella adquieren especial relevancia los espacios en que se sitúa a los personajes, tanto los paisajes como los recintos interiores, pues estos lugares constituyen la memoria de los protagonistas quienes, buceando en su pasado, tratan de redescubrirse a sí mismos y volver a tomar las riendas de su vida. 

 

 

Vuelven los festivales de música, teatro, danza…

Hasta ahora, el verano no era tal si no se celebraban los habituales festivales de música, teatro, danza… Tras un año en blanco, los festivales suben la persiana y arrancan un periodo estival que esperan y desean pleno de diversión alrededor del arte. Vamos a destacar algunas de las citas que no deberían perderse: el Festival Internacional de Teatro, Música y Danza de San Javier celebra su 51 edición con un programa más corto, del 10 al 22 de agosto, con 12 espectáculos. Comenzará el 12 de agosto con La casa de los espíritus. La música no se hará esperar, así el 13 de agosto recibirá a Mastodonte, la banda del actor y cantante Asier Etxeandia y el músico Enrico Bárbaro. El mismo día y también el 14 de agosto, llega José Luis Gómez con Mío Cid. Juglaría para el siglo XXI, una producción del Teatro de La Abadía. El Festival siempre ha guardado alguna fecha para el teatro del Siglo de Oro. En esta ocasión será Lope de Vega y Peribáñez y el comendador de Ocaña, con la compañía Noviembre Teatro. El Festival se despide el 22 de agosto con Edipo, una coproducción del Festival Internacional de Mérida, Pentación y el Teatro Español. Por su parte, el festival La Mar de Músicas de Cartagena celebra su 26 edición. Finalmente, han decidido aplazar la edición dedicada a la República Dominicana para centrarse en el talento de España. Así, veremos a Baiuca, Los Planetas junto a Niño de Elche, Califato 3/4, Derby Motoretas Burrito Kachimba, Kiko Veneno, Raül Refree, Silvia Pérez Cruz, Israel Fernández, María José Llergo, Maria Arnal i Marcel Bagés, Rodrigo Cuevas, Maria del Mar Bonet, Fuel Fandango… Del 16 al 24 de julio. Además, Jorge Drexler recogerá el premio La Mar de Músicas 2021 y disfrutaremos de Yseult y Rufus Wainwright. Ben Harper suspende su gira europea y no actuará en La Mar de Músicas así que han decidido que  Quique González sustituya al guitarrista. Si, por otra parte, quieren un entorno privilegiado, Los jardines de Pedralbes es su lugar para el arte. Uno de los pulmones de la Ciudad Condal y uno de los jardines más bonitos que hay repartidos por toda la ciudad. Un magnífico espacio para correr, pasear, descansar y durante estos meses de verano bailar y escuchar música. Hasta el 24 de julio podrán disfrutar de Vanesa Martín, Fangoria, Sergio Dalma, Loquillo, Diego El Cigala, Rozalén, Mónica Naranjo, Carlos Rivera, Amaia, Alan Parsons,  Jorge Drexler, Nathy Peluso, Miguel Ríos, Sidonie… Y, no puede faltar el jazz. El Festival de Jazz de San Sebastián ofrecerá del 21 al 25 de julio un total de 60 conciertos que se celebrarán en ocho escenarios distintos con una programación de lujo: Brad Mehldau, Cécile McLorin Salvant, Sílvia Pérez Cruz, Kenny Barron, Noa, Arlo Parks, Mulatu Astatke, Jorge Pardo, Buika, Gonzalo Rubalcaba, Bill Frisell, Marc Ribo… Como novedad este año, el 56 Jazzaldia ofrecerá dos conciertos en Chillida Leku. Ambos comenzarán a las 19:00 horas para aprovechar el magnífico paisaje del museo en el momento de la puesta de sol.

 

Muy recomendable entre concierto y obra de teatro, Elipses, de Juan Mayorga. Por primera vez se reúnen los ensayos, conferencias y artículos del dramaturgo y filósofo, uno de los creadores españoles más importantes de los últimos años. Los textos reflejan sus posiciones y preguntas sobre temas como la historia, la memoria, Europa, el par cultura/barbarie y, por supuesto, el teatro. El volumen incluye una conversación inédita con el crítico Ignacio Echevarría. El título Elipses, nace del deseo de Mayorga de que cada uno de estos textos lo complete el lector con su percepción, porque “un auténtico diálogo es una elipse”, según expresa en el prólogo del volumen editado por La uÑa RoTa, que ya publicó el Teatro 1984 – 2014 y su pieza Reikiavik

 


Djokovic busca ser el rey de Wimbledon

Wimbledon regresa dos años después del último torneo. Wimbledon vuelve a sonreír. Veremos a Novak Djokovic buscar su 20º ‘grande’ y ¿tercer título seguido en Londres? Sería su sexto título en la hierba londinense para igualar a Roger Federer y Rafa Nadal. Sin Nadal y con Federer en baja forma, parece el máximo candidato. Pero no nos quedemos con el rumor de la baja forma de Federer ya que el campeón se deja caer por la pista central, en la que ha levantado ocho títulos, con toda la fuerza. Dos años después, el torneo al que sólo pararon las bombas y la pandemia, resurge para reflotar, a golpe de eso que llaman hoy normalidad, a un país marcado por el virus. El evento se disputará con algunas de las limitaciones que ha generado la pandemia. Sólo podrán acceder al recinto aquellas personas que, al comprar la entrada, traigan un certificado de vacunación o una PCR negativa. La mascarilla no será obligatoria para el público. 

 

Una de las últimas novedades respecto a literatura sobre deporte y, en concreto, sobre tenis es Serena Williams, de Gerald Marzorati, traducido en España por Esther Cruz y Raquel Gu, en Geoplaneta. Gerald Marzorati es un veterano periodista de tenis y exeditor de The New York Times Magazine. Con Serena Williams nos lleva de viaje a través de la temporada 2019 con las paradas que tuvo en todos los torneos importantes. Marzorati asistió a todos los Slams y otros tres grandes torneos y ocasionalmente habló con Serena y otras estrellas del tenis, desde su actual entrenador Patrick Mouratoglou hasta su entrenador de la infancia Rick Macci, Chris Evert y Tracy Austin. La retrata como una celebridad global, una supermujer como Beyoncé o Michelle Obama. Una estrella consciente del físico en una era en la que la gente está disparatando la definición de belleza. Y una madre trabajadora. Precisamente este es el deseo más presente para Serena: el imperativo de ganar el TORNEO, el torneo como madre. El tema  domina el libro. No ha ganado un solo título de Grand Slam desde que se convirtió en madre. Para ella es una de las montañas más desafiantes en el deporte: sólo una madre ha ganado un Slam en los últimos 40 años. Parte del desafío es recuperar su cuerpo después de tener un bebé. Serena contempla cómo si decides tener un bebé tu ranking se desploma y tienes que reconstruir tu estatus.