Hoy se presenta el libro Más que juntos y quizá por eso estoy con el espíritu predispuesto a la consideración matrimonial:
Así que, cuando hemos visto a una pareja monísima (ella —por supuesto— mucho más) de novios y ellos y nosotros hemos cruzado un instante las miradas como en un extraño espejo, he entrado en modo satori.
Le he dado un codacito a Leonor y he apuntado corriendo un haiku conyugal:
Mira los novios.
Están soñando ser
como tú y yo.